"4,32 millones de personas con discapacidad,
más de 8.000 asociaciones luchando por sus derechos"
Opinión
Óscar y Ester, en el Hotel Palace
Por Enrique Galván, Director de FEAPS
08/01/2015
El otro día tuve la suerte de asistir a la entrega de los premios de la Revista Emprendedores. Cuando terminó, sentí cierto vacío al comprobar que aquello que había ocurrido en esa soleada mañana de invierno en un hotel de lujo de Madrid, sería muy difícil de compartir. Pero este espacio me da la oportunidad de haceros participes de lo que ocurrió aquel día y de lo que supuso para los que allí estuvimos.
A la Cooperativa ALTAVOZ le entregaban el Premio de Emprendedores del Año en la categoría de personas con discapacidad. El contexto ya os lo podéis imaginar. Muchas personas muy importantes del mundo empresarial, del deporte, de los medios de comunicación y allí estaban Ester, Óscar y la madre de Ester gente como nosotros, personas y familias.
Hubo primero una mesa redonda con Enrique Loewe de la firma de lujo que lleva su apellido, el Presidente de Imaginarium, el Director de la firma Silestone, el material para encimeras que triunfa en el mundo, el dueño de la cadena de Hoteles Room Mate. Gente importante que decía cosas interesantes.
En aquel espacio y con ese clima de personas de éxito, yo me preguntaba ¿Cuál sería el papel de Óscar y Ester? Sentía su tensión ante la situación. Los nervios pero también el deseo. Entonces llegó su turno. El conductor de los premios, que actuaba con gran profesionalidad, les nombró y el Vicepresidente de la Fundación Once les hizo entrega de la estatuilla. Era su momento. Se oyó su voz diferente, no exenta de dificultades pero sonora y rotunda, hubo un instante de vacilación que con apoyo se supo resolver sin descomponerse, sin sentir vergüenza por ello, siguió escuchándose su palabra, que aceptaba la discapacidad intelectual, pero que no les acobardaba, hablaban de sus talentos de sus logros y metas. Un mensaje claro y poderoso, tan poderoso como los de los anteriores premiados, pero con otro valor añadido. Su negocio podría tener éxito o fracasar, contarían con más o menos recursos, pero lo importante de aquella mañana, o lo que yo al menos sentí, era una nueva presencia, más completa, sin almíbar, con un punto tal vez desafiante, emocionada, pero no dependiente de otras personas. Personas con discapacidad intelectual que saben lo que quieren, que se arriesgan, que cuentan con apoyos pero que viven intensamente su vida para lo bueno y para lo malo.
Al terminar hubo un aplauso cerrado y de forma lenta se fue levantado el público, uno aquí, dos allí, hasta que pude observar como todo el auditorio en pie les rendía su homenaje. La madre de Ester me miró y nos lo dijimos todo. Justo en aquel instante me vino a la mente el 50 Aniversario de FEAPS, aquel reconocimiento era para Óscar, Ester, para su madre y para tanta gente que durante muchos años ha luchado por esa nueva presencia, una forma plena de estar en la vida. Una tarea que sigue. Pero en el 50 aniversario de FEAPS es un homenaje a las personas presentes y ausentes que han luchado por alcanzar vidas mejores para cada persona y cada familia, de formas diversas se enfrentaron valientes a los obstáculos y las dificultades, y para seguir lográndolo, hay que decir como aquel Cyrano de Bergerac de la Opera de Alfano que ante la muerte le espetaba “ me podrás quitar la vida pero jamás me podrás arrebatar mi valentía” . Que no la perdamos para seguir juntos luchando.